¿Por qué unirse a un sindicato?
En el último año, hemos visto un incremento agudo en luchas de sindicalización, y de interés entre los trabajadores en la sindicalización. Esto representa una aceleración de una tendencia que ha existido por varios años. Un estudio de MIT publicado en 2018 encontró que el 48% de los trabajadores votarían para juntarse a un sindicato, un porcentaje mucho más alto que el 33% de trabajadores que expresaron interés en unirse a un sindicato en 1977, cuando la densidad sindical era mucho más alta.
Los sindicatos son esenciales para unir a los trabajadores en la lucha para defender nuestros intereses contra los avaros empleadores. Nuestra debilidad como trabajadores, y como consecuencia, la necesidad de los sindicatos, han sido particularmente aparentes en momentos de crisis, incluso la pandemia actual. Mientras que la rentabilidad se desplomó durante las cuarentenas del COVID, los empleadores incrementaron la presión contra los trabajadores para controlar los gastos laborales. Solo a través de los esfuerzos colectivos de la clase obrera podemos construir un movimiento sindical más fuerte que pueda rechazar las pérdidas que sostenemos durante la pandemia y ganar nuevos terrenos.
Los sindicatos son la forma que toma la lucha económica de los trabajadores en una sociedad capitalista. Afuera de la lucha colectiva, los trabajadores son meros individuos, sin la fuerza para llevar a cabo mejoras significantes en nuestros estándares de vivencia y de trabajo. Cuando los trabajadores son fuertes, los trabajadores ganan una porción más grande del valor que producen, y cuando los sindicatos son débiles, los trabajadores luchan sólo para llegar al final de més. La gráfica siguiente del Instituto de Política Económica ilustra esta relación entre la desigualdad social y membresía sindical:
Mientras avanzamos nuestro proyecto para un sindicato independiente y democrático para todos los trabajadores en la industria de restaurantes, es importante recordar lo que los sindicatos concretamente proveen a través de la lucha.
Negociación Colectiva
Como respuesta a luchas laborales combativas, la Ley Nacional de Relaciones de Trabajo (LNRT) de 1935 estabilizó derechos de negociación colectiva para trabajadores. Mientras que la LNRT fue aprobada originalmente como un tipo de tregua en la lucha de clases entre los trabajadores y el capital, la negociación colectiva es un derecho esencial que tenemos que usar a nuestra ventaja.
La negociación colectiva permite que los sindicatos legalmente reconocidos negocien con los capitalistas para llegar a acuerdos contractuales que regulan las horas de trabajo, salarios, condiciones de trabajo, beneficios, protocolos de seguridad, procesos de agravios, y otros aspectos de nuestras vidas como trabajadores. La negociación colectiva no solamente quiere decir que no tenemos que luchar solos, sino también que nuestras victorias tienen que ser reconocidas y seguidas por los patrones.
Salarios Más Altos
Uno de los mayores beneficios de la sindicalización a los trabajadores son los salarios más altos. Un buen sindicato puede asegurar que ganamos lo que nos merecemos, fijando un salario alto y luchando por incrementos sustanciales regularmente.
Mientras que los sindicatos fuerzan a los dueños a aceptar un salario alto, los trabajadores no sindicalizados no tienen esa fuerza. De acuerdo a un reporte del Despacho de Estadísticas Laborales de 2020, el trabajador sindicalizado por promedio ganó 19% más que el trabajador no sindicalizado, mientras que en algunas categorías de trabajadores, la diferencia fue más grande. Por ejemplo, entre los trabajadores Latinos, la brecha entre los sindicalizados y los no-sindicalizados fue el 33%. Esta ventaja se llama el “recargo de salarios sindicales.”
Durante la pandemia, cuando los trabajadores de restaurantes no-sindicalizados fueron despedidos en sus decenas de miles, los trabajadores sindicalizados ganaron incrementos de salarios. Por ejemplo, los trabajadores en Campbell’s Soup, organizados con los United Food and Commercial Workers (UFCW), ganaron un recargo de $2/ hora en pago, mientras que los trabajadores de Danone Norteamérica – organizados con el mismo sindicato – ganaron un incremento salarial del 15%.
El contraste con nuestra industria sin sindicalización no podría ser más aparente.
Pensiones y Beneficios de Cuidado de Salud
De hecho, la brecha de salario entre los sindicalizados y los no-sindicalizados es más grande que sugieren las estadísticas, porque los que no estamos sindicalizados gastan una porción considerable de nuestros salarios en cuidado de salud y en ahorros de jubilación.
Solo una pequeña minoría de los trabajadores no-sindicalizados están cubiertos por una pensión, que quiere decir que la mayoría de los trabajadores tendrán que trabajar con mayor edad, esperando para retirarse – particularmente dado la tasa baja de ahorros. Sobre el asunto de cuidado de salud, la gran mayoría de los trabajadores de restaurantes que siguieron trabajando durante la pandemia han tenido que enfrentar la posibilidad de caer enfermo con un virus potencialmente mortal sin seguro médico adecuado.
Los hechos hablan por sí mismos. De acuerdo con en reportaje IPE:
“La ventaja más clara para los trabajadores sindicalizados es en los beneficios adicionales. Los trabajadores sindicalizados tienen más probabilidad que sus contrapartes no-sindicalizados de recibir licencia pagada, son aproximadamente 18% al 28% más probables de tener seguro médico ofrecido por el empleador, y son 23% al 54% más probables de estar en planes de pensión ofrecidos por el empleador.
“Los trabajadores sindicalizados reciben beneficios de salud más generosos que los no-sindicalizados. También pagan el 18% menos en deducibles de cuidado de salud y una porción más pequeña en los costes de cobertura familiar. En retiro, los trabajadores son 24% más probables de ser cubiertos por seguro médico pagado por su empleador.
“Los trabajadores sindicalizados reciben planes de pensión mejores. No solo son más probables de tener beneficios garantizados en jubilación, sus empleados contribuyen 28% más hacia su pensión.”
Un buen sindicato podrá asegurar pensiones y beneficios de cuidado de salud por encima de los salarios aumentados.
Salud y Seguridad en el Trabajo
Para los dueños de restaurantes, el restaurante es al final el medio con que pueden explotar a los trabajadores, la obra de cuál es la fuente de sus ganancias. La cuestión de la manera en que se protege a los trabajadores alrededor de la salud y seguridad a penas no entra en sus calculaciones. Durante las caídas de negocio, incluso la crisis económica que siguió a la pandemia, hasta el dueño con buenas intenciones tuvo que hacer todo lo posible para maximizar ganancias, incluso llenar al restaurante de clientes lo más posible.
Enfrentadas con estas condiciones, los sindicatos tienen la capacidad de forzar a los empleadores a desarrollar la protección laboral alrededor de salud y seguridad, asegurando que todos los trabajadores están protegidos y dados el equipaje y los recursos adecuados para evitar a la enfermedad y las lesiones. Esto ha sido de más alta importancia durante el periodo de COVID-19.
Por ejemplo, los Communications Workers of America (CWA) aseguraron licencia pagada familiar y de salud para trabajadores sindicalizados de Verizon durante la pandemia. El acuerdo incluyó 26 semanas de licencia médica pagada para individuos que dieron positivos por COVID-19 y 8 semanas de licencia pagada para cuidar de familiares diagnosticados con COVID-19.
Otro ejemplo: los United Auto Workers (UAW) convenció a General Motors, Ford, y Fiat Chrysler a cerrar sus operaciones por dos semanas para decelerar al virus, y negociaron con las compañías para proveer equipo de protección, incluso mascarillas a todos los trabajadores.
Desde la perspectiva del sindicato, una de las tareas más importantes que encontramos como trabajadores es la mejora continua de nuestras condiciones de trabajo y la protección de la seguridad y la salud de los trabajadores.
Seguridad de Empleo
Cualquier trabajador de restaurante sabe la precariedad de su posición en el restaurante. En la industria de restaurantes, los trabajadores son despedidos continuamente. El resultado es un clima de temor, en que los trabajadores no se atreven a luchar por sus propios intereses. Si por ejemplo, un amigo del dueño acosa a un trabajador, puede calcular que la mejor opción es quedarse callado e intentar a evitar a ese cliente lo mejor posible.
Contra el arma del patíbulo, los sindicatos refuerzan la seguridad de empleo, asegurándose que ningún trabajador esté disciplinado o despedido sin razón válida y concreta. Antes que un empleador discipline a un trabajador sindicalizado, el dueño tiene que mostrar mérito de acuerdo con un proceso de agravios en que los trabajadores juegan el papel decisivo.
Además, un sindicato militante que rechaza a “cláusulas anti-huelga” y “cláusulas de prerrogativas de gerentes” – lo primero que previene que los trabajadores salgan en huelga durante el periodo de contrato, el segundo que previene que los trabajadores tengan voz en despidos o cierres de locales – pueden usar la fuerza colectiva de los trabajadores para montar una huelga o un piquete para proteger la seguridad de empleo.
La Lucha Para la Igualdad
Los sindicatos son capaces de apoyar a la gente oprimida en sus luchas por la igualdad económica también en su lucha contra las vulgaridades del racismo y sexismo. A través de ganar la confidencia de secciones amplias del pueblo trabajador, los sindicatos pueden organizar una unidad genuina y combativa que luchará por los intereses de los trabajadores. Esto incluye:
—Ganar pago igual para las secciones mal pagadas de la fuerza obrera (las mujeres trabajadores, y los trabajadores Negros y Latinos), de acuerdo con el principio de “un salario igual por trabajo igual”;
—Ganar indemnizaciones por despido para los trabajadores indocumentados, para compensar por su inelegibilidad de recibir seguro de desempleo (que ha sido devastador durante la pandemia);
—Luchar por medidas concretas para combatir todas formas de discriminación en el trabajo, del acoso sexual al abuso racista por los clientes, los dueños, gerentes, y compañeros de trabajo.
Políticamente, los sindicatos deben dirigir el camino adelante en hacer cumplir las transformaciones necesarias más progresivas en nuestra sociedad, incluso la verdadera igualdad para los Americanos Negros, y derechos básicos para los trabajadores indocumentados: anular la LRCI (que forza a los empleadores a validar la cuidanía o residencia legal), le decisión Hoffman (que hace que los trabajadores indocumentados ilegalmente despedidos son inteligibles por salarios atrasados y la restauración de su trabajo), y ganar el derecho a los indocumentados a recibir cobertura de seguro de desempleo.
Los sindicatos crean las condiciones para la concentración de poder a gran escala en las manos de los trabajadores para que podamos luchar para ganar una vida mejor para todos.
La importancia de los sindicatos va más allá de los asuntos de los sitios de trabajo. Mientras crezca el movimiento laboral y cada vez más trabajadores estén organizados en sindicatos militantes, los trabajadores habrán
establecido una base formidable desde cual podremos luchar para reorganizar a la sociedad en los intereses de la gran mayoría, las masas de Americanos que trabajan por un salario.